¿Aguinaldo completo o promesa vacía?: El PAN propone eliminar el ISR y desata debate
Iniciativa presentada en la Cámara de Diputados plantea un aguinaldo de 40 días de salario sin deducciones fiscales
CDMX.- En un movimiento que busca captar la atención de los trabajadores mexicanos, el Partido Acción Nacional (PAN) presentó este jueves en la Cámara de Diputados una iniciativa para eliminar el Impuesto Sobre la Renta (ISR) al aguinaldo, una prestación obligatoria desde 1970 que equivale a al menos 15 días de salario, pero que actualmente se grava cuando supera los 8,475 pesos, afectando hasta un 30% del monto en algunos casos. Con carteles que prometen un “Aguinaldo Completo” y una imagen de un billete de 50 pesos envuelto como regalo, el diputado Armando Tejeda Cid, líder de la propuesta, arremetió contra el gobierno, calificando de “inaceptable” que se retenga parte de lo que los trabajadores “se han ganado”.
La iniciativa, que plantea un aguinaldo de 40 días de salario dividido en dos pagos (50% antes del 15 de diciembre y el resto en enero), suena atractiva en un contexto de inflación y pérdida de poder adquisitivo. Sin embargo, el costo fiscal estimado —unos 20,000 millones de pesos anuales según cálculos del propio PAN— levanta dudas sobre su viabilidad. Tejeda sostiene que el impacto se compensaría con un mayor consumo en diciembre, pero la falta de un plan concreto para financiar esta renuncia fiscal pone en jaque su credibilidad. ¿Es una medida seria o un golpe mediático de cara a las próximas elecciones?
Las reacciones no se han hecho esperar. Mientras algunos usuarios en redes sociales aplauden la idea, otros la ven como populismo tardío, cuestionando por qué no se impulsó durante los gobiernos de Fox o Calderón, ambos del PAN. Incluso hay propuestas contrarias, como destinar los sueldos de diputados para financiar el beneficio, un recordatorio de la desconfianza hacia la clase política. Por su parte, Morena, que domina el Congreso, podría frenar la iniciativa, lo que alimentaría el discurso panista de “gobierno insensible”, pero también pondría a prueba su compromiso con los trabajadores.
El debate está servido: detrás de los carteles azules y las promesas de un aguinaldo “completo” se esconden preguntas clave. ¿Quién pagará la cuenta? ¿O es esta propuesta más un espejismo electoral que una solución real? Por ahora, los trabajadores esperan, mientras los números y la voluntad política decidirán si esto es un regalo o una ilusión.