CCCC: la fábrica de durmientes para el Tren Maya en Tabasco, ligada al Gobierno de China y al Partido Comunista Chino
Claudia Sheinbaum, afirmó que en el Tren Maya no hay inversión China, en respuesta a una carta de los congresistas de EU que piden a Donald Trump, investigar la posible conexión con el PCC.
Análisis.- En 2021 la fábrica china de durmientes para el Tren Maya, “China Communications Construction Company”, empezó operaciones en Balancán, Tabasco, donde instaló su planta de producción. Esta empresa, conocida como CCCC, tiene como principal accionista al Gobierno de China, con un 63.8 por ciento de participación, y una integración con el Partido Comunista Chino, tanto así que algunos de sus directivos se han desempeñado en ambas entidades a la vez. Este lunes, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, afirmó que en el Tren Maya no hay inversión China, en respuesta a una carta de los Congresistas de Estados Unidos, quienes piden a su presidente, Donald Trump, investigar la posible participación china y del Partido Comunista Chino, en el proyecto ferroviario de la 4T.
Una investigación en línea sobre la China Communications Construction Company (CCCC) revela una serie de detalles sobre su estructura, propiedad y conexiones con el Partido Comunista Chino (PCC) y el gobierno chino. A continuación, se presenta un análisis exhaustivo basado en información disponible en diversas fuentes, incluyendo sitios web oficiales, artículos de prensa y bases de datos públicas, con un enfoque en redes en múltiples idiomas, incluyendo chino.
Contexto General de CCCC
CCCC es una empresa multinacional de ingeniería y construcción, mayoritariamente propiedad del estado, que cotiza en bolsa y se dedica principalmente al diseño, construcción y operación de activos de infraestructura, como carreteras, puentes, túneles, ferrocarriles de alta velocidad, aeropuertos y puertos marítimos. Fue formada en 2005 mediante la fusión de China Road and Bridge Corporation (CRBC) y China Harbour Engineering Company (CHEC), y sus predecesores se remontan a la dinastía Qing, con la creación de la Oficina de Ingeniería Junpu en 1905. La empresa es un contratista clave en proyectos de la Iniciativa de la Franja y la Ruta y está incluida en la lista Fortune Global 500 desde 2016 (China Communications Construction Company - Wikipedia).
CCCC opera a través de varias subsidiarias, como John Holland Group en Australia, Friede & Goldman en Houston y Concremat Engenharia e Tecnologia en Brasil, y tiene presencia en más de 157 países, con 162,151 empleados y más de 60 subsidiarias (China Communications construction company Ltd.). Su sede está en Beijing, China, y su código de acciones en la Bolsa de Hong Kong es 1800.HK (CHINA COMMUNICATIONS CONSTRUCTION COMPANY (M) SDN BHD).
Propiedad y Conexión con el Gobierno Chino
Un aspecto central es la propiedad de CCCC. Según la información disponible, el State-owned Assets Supervision and Administration Commission of the State Council (SASAC), una agencia del gobierno chino, posee el 63.8% de las acciones de la empresa, lo que la convierte en una empresa mayoritariamente propiedad del estado (China Communications Construction Company - Wikipedia). Esto significa que el gobierno chino tiene un control significativo sobre las decisiones estratégicas de CCCC, ya que SASAC es responsable de supervisar y administrar los activos estatales en China. Esta estructura es típica de las empresas estatales chinas, que a menudo actúan como extensiones de las políticas gubernamentales, especialmente en proyectos de infraestructura globales.
La conexión con el gobierno también se refleja en proyectos específicos, como la construcción del puerto de Hambantota en Sri Lanka, donde CCCC estuvo involucrado y que fue financiado por préstamos del Banco de Exportación e Importación de China, lo que ilustra la alineación de la empresa con los intereses económicos y estratégicos del estado (China’s construction companies sow chaos worldwide - U.S. Embassy in Georgia).
Conexión con el Partido Comunista Chino
En cuanto a la conexión con el Partido Comunista Chino (PCC), la evidencia sugiere una integración significativa. En China, las empresas estatales suelen tener comités del partido (Dang Weiyuanhui) como parte de su estructura organizativa, y CCCC no es una excepción. Un informe específico menciona a Chen Yun, quien fue secretario del partido de CCCC y también ocupó cargos como presidente y director ejecutivo de la empresa en diferentes períodos (China Railway Chairman and President adjustment!--Seetao). Esto indica que el secretario del partido no solo existe, sino que también ocupa una posición de liderazgo dentro de la empresa, lo que refuerza la influencia del PCC en la toma de decisiones corporativas.
Además, en proyectos internacionales, como la construcción del ferrocarril de Nairobi-Mombasa en Kenia, se menciona a Chen Yun como "Deputy Secretary of CPC CCCC Committee", confirmando la presencia de un comité del partido dentro de la empresa (News Releases). Esta estructura es consistente con las prácticas del PCC, que busca mantener control político sobre las empresas estatales mediante la colocación de miembros del partido en posiciones clave, como se detalla en estudios sobre la influencia del partido en empresas chinas (Party Committees in Chinese Companies | Seafarer Funds).
Clasificación Internacional y Controversias
Un detalle adicional es la clasificación de CCCC por parte del gobierno de EE. UU. En agosto de 2020, el Departamento de Comercio de EE. UU. incluyó a varias subsidiarias de CCCC en la Lista de Entidades por su trabajo en la militarización de islas artificiales en el Mar de China Meridional, y el Departamento de Defensa la identificó como una "compañía militar comunista china" operando directa o indirectamente en EE. UU. (U.S. blacklists 24 Chinese firms, escalating military and trade tensions - POLITICO). Esta clasificación, que incluye restricciones a las inversiones de empresas estadounidenses en CCCC, sugiere vínculos con el ejército chino, que está subordinado al PCC, y ha generado controversias, especialmente en el contexto de tensiones geopolíticas entre EE. UU. y China.
Impacto Global y Proyectos Relevantes
CCCC ha estado involucrada en proyectos de alto perfil, como el ferrocarril de la Costa Este en Malasia, donde se alegó que participó en esquemas para resolver deudas relacionadas con 1MDB, aunque estas acusaciones fueron negadas por Malaysia Rail Link Sdn Bhd (China Communications Construction Company - Wikipedia). También ha enfrentado sanciones del Banco Mundial en 2009 por prácticas fraudulentas en proyectos en Filipinas, lo que añade un elemento de controversia a su historial (China Communications Construction Company - Wikipedia).
En el contexto del Tren Maya en México, CCCC ha establecido una fábrica de durmientes en Balancán, Tabasco, como parte de su participación en el Tramo 1 del proyecto, generando empleo local pero también enfrentando paros laborales por disputas salariales (China Communications Construction Company - Wikipedia). Este proyecto ilustra cómo CCCC actúa como un actor global en la expansión de la influencia china, alineada con los objetivos del PCC y el gobierno.
Contexto del contrato de CCCC en el Tren Maya
En el caso del Tren Maya, CCCC forma parte del consorcio ganador de la licitación para el Tramo 1 (Palenque, Chiapas, a Escárcega, Campeche), adjudicada el 23 de abril de 2020 por el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur). Este consorcio incluye a Mota-Engil México, Grupo Cosh, Eyasa y Gavil Ingeniería, con un contrato valuado en aproximadamente 15,538 millones de pesos (unos 740 millones de dólares en ese momento), abarcando 226 kilómetros de vía.
Dentro de este contrato, CCCC asumió un rol clave en la producción de durmientes (traviesas de concreto que sostienen los rieles), instalando una fábrica en el municipio de Balancán, Tabasco, específicamente en el poblado de El Triunfo. Esta planta se diseñó para abastecer los durmientes necesarios para el Tramo 1, que atraviesa Chiapas, Tabasco y Campeche, incluyendo 99 kilómetros en territorio tabasqueño con estaciones en Boca del Cerro (Tenosique) y El Triunfo (Balancán), además de un paradero en Tenosique.
Detalles de la fábrica en Balancán, Tabasco
La fábrica de durmientes de CCCC en Balancán comenzó operaciones en 2021, como parte del esfuerzo para acelerar la construcción del Tren Maya, un proyecto prioritario del gobierno mexicano. Según reportes de la época:
Producción inicial: En noviembre de 2021, la planta producía 1,200 durmientes diarios, con planes de incrementar a 2,000 por día mediante la ampliación de turnos. Para julio de 2022, CCCC informó haber fabricado más de 100,000 durmientes, demostrando un avance significativo.
Proceso de fabricación: La producción involucra cortar líneas de acero, armar estructuras, tensar moldes, mezclar concreto, vibrar para evaluar calidad y curar los durmientes con vapor durante 24 horas para mayor resistencia e impermeabilidad.
Capacidad y empleo: La planta opera con tres turnos y emplea a unos 345 trabajadores por día (115 por turno), muchos de ellos locales, generando más de 6,000 empleos indirectos en Tabasco hasta esa fecha, según el gobierno estatal.
El gobernador de Tabasco, Carlos Manuel Merino Campos, visitó la planta el 25 de noviembre de 2021, destacando que los durmientes se entregarían completamente en febrero de 2023, alineándose con los plazos originales del Tramo 1, que debía concluir en julio de 2023. Sin embargo, factores como el clima cálido y retrasos logísticos afectaron el cronograma general del Tren Maya.
Aspectos del contrato
Aunque los detalles financieros específicos del subcontrato para los durmientes no se desglosan públicamente (el monto total del consorcio cubre diseño, construcción y mantenimiento), se sabe que:
Duración: El contrato principal estipula 28 meses de construcción (hasta mediados de 2022) y 5 años de mantenimiento posterior.
Responsabilidades de CCCC: Además de los durmientes, CCCC participó en la colocación de vías, ajuste de rieles y optimización de recursos, según su propio reporte en 2022.
Certificación: Los primeros lotes de durmientes se enviaron a Estados Unidos para pruebas de resistencia, asegurando estándares internacionales antes de la producción masiva.
Controversias y desafíos
Protestas laborales: En mayo de 2023, 300 obreros no sindicalizados de la planta en Balancán pararon labores exigiendo el pago de 90 días de utilidades, salarios atrasados y bonos. La empresa ofreció solo 30 días, argumentando falta de recursos, lo que generó tensiones. La intervención de la Guardia Nacional y la Sedena evitó mayores conflictos, pero el incidente expuso problemas de gestión laboral.
Antecedentes de CCCC: La empresa tiene un historial de controversias, incluyendo una inhabilitación por el Banco Mundial (2009-2017) por prácticas fraudulentas en Filipinas. Aunque la sanción no estaba vigente al ganar la licitación, levantó críticas de ambientalistas y opositores al Tren Maya.
Impacto local: En El Triunfo, la llegada de la fábrica trajo cortes de luz y presión sobre servicios básicos, evidenciando una infraestructura local insuficiente para soportar la obra.
Relación con las declaraciones de Sheinbaum
Claudia Sheinbaum ha negando financiamiento chino en el Tren Maya, afirmando que los recursos son públicos y mexicanos. Esto parece contrastar con la participación de CCCC, una empresa estatal china, en el proyecto. Sin embargo:
Aclaración técnica: Sheinbaum se refiere al financiamiento del proyecto (presupuesto del gobierno mexicano), no a la contratación de empresas extranjeras para su ejecución. CCCC no aporta fondos, sino que fue contratada bajo licitación para construir, incluyendo los durmientes.
Inversión de CCCC: La empresa invirtió en la planta de Balancán (equipos, personal), pero esto forma parte de su ejecución contractual, no de un préstamo o financiación directa al proyecto.
Conclusión
El contrato de CCCC para producir durmientes en Balancán, Tabasco, es un componente clave del Tramo 1 del Tren Maya, con una fábrica que ha generado empleo y avanzado en la infraestructura ferroviaria, pero no sin desafíos. La planta refleja la capacidad técnica de CCCC, aunque su historial y las tensiones laborales han generado cuestionamientos.
La negación de Sheinbaum sobre financiamiento chino no contradice este contrato, ya que se trata de ejecución, no de aportación de capital. Para datos más específicos (cifras exactas de inversión en la planta o número final de durmientes), sería necesario acceder a documentos oficiales de Fonatur o CCCC, pero hasta marzo de 2025, esta es la reconstrucción más precisa con la información disponible.
El consorcio liderado por CCCC, que incluye mantenimiento por 5 años tras la construcción (hasta 2027 aproximadamente), podría implicar que la fábrica se mantenga activa para producir durmientes de reemplazo o para otros proyectos. Sin embargo, no hay evidencia reciente que lo confirme.
Todas las fotos tomadas en la planta de durmientes de China Communications Construction Company en Balancán, Tabasco. Archivo Enero de 2023 (Esmaragdo Camaz)