China presenta el primer robot humanoide de seis brazos para fabricar lavadoras
Midea Group desplegará a finales de 2025 en su planta de Wuxi el MIRO U, un robot con seis brazos y ruedas que reducirá un 30 % el tiempo de producción de electrodomésticos
China.- En un movimiento que acelera la carrera global por la automatización industrial, el gigante chino de electrodomésticos Midea Group ha presentado el MIRO U, un robot humanoide con seis brazos que promete transformar la producción de lavadoras. Este “superhumanoide” con ruedas, una evolución del modelo de dos brazos ya en operación en la planta de Jingzhou, se desplegará a finales de 2025 en la fábrica de alta gama de Wuxi. Con capacidad para multitarea simultánea —ensamblaje, inspección y manipulación de piezas—, Midea asegura que reducirá el tiempo de ciclo (takt time) en un 30%, elevando la eficiencia sin pausas humanas. Pero detrás del brillo tecnológico, surge la sombra: ¿es esto un salto innovador o el preludio a una obsolescencia laboral masiva en un país donde la mano de obra barata ha sido el pilar económico?
Midea, con ingresos anuales superiores a los 50.000 millones de dólares y presencia en más de 200 países, no actúa en el vacío. China invierte miles de millones en robótica para contrarrestar el envejecimiento poblacional y la escasez de mano de obra calificada, con más de 300.000 robots industriales instalados solo en 2024 según la Federación Internacional de Robótica. El MIRO U, equipado con IA para aprendizaje autónomo, no solo ensamblará electrodomésticos, sino que podría redefinir cadenas de suministro globales, presionando a competidores como Whirlpool o Samsung a acelerar sus propias apuestas robóticas. Críticamente, mientras Pekín celebra esta “autonomía tecnológica”, críticos como el economista Yu Yongding advierten de desigualdades crecientes: en fábricas como las de Midea, miles de trabajadores ya enfrentan recortes por automatización, un recordatorio de que el progreso mecánico a menudo se cobra en empleos humanos.
Aún así, el impacto trasciende lo local. Si el MIRO U cumple expectativas, podría democratizar la producción de bajo costo, beneficiando a consumidores con lavadoras más asequibles y ecológicas. Pero la pregunta persiste: ¿quién gana en esta era de brazos mecánicos infinitos? China parece apostar por un futuro donde la máquina no solo trabaja, sino que sueña con la perfección productiva.



