¿Crisis en las bombas? Retrasos en suministro de gasolina afectan a más de 100 gasolineras en México
Problemas logísticos y protestas de transportistas impactan estaciones en Chiapas, Nuevo León, CDMX y Edomex
CDMX.- En plena transición energética prometida por el gobierno, México revive fantasmas del pasado con retrasos en el suministro de combustible que han forzado el cierre temporal de más de 100 estaciones de servicio esta semana. Aunque Pemex insiste en que no hay desabasto real –argumentando que sus Terminales de Almacenamiento y Reparto (TAR) están surtidas–, la realidad en las calles dice lo contrario: pipas demoradas y protestas de transportistas exponen fisuras en la logística de la paraestatal.
El problema golpea principalmente a cuatro regiones: Chiapas, con al menos 27 estaciones afectadas (hasta 40 el martes, un 7.6% de las 352 en el estado), donde piperos bloquean rutas por adeudos pendientes de Pemex; Nuevo León, con 42 gasolineras impactadas (5.6% del total local); y la zona metropolitana de CDMX y Edomex, donde decenas de puntos en alcaldías como Tlalpan, Coyoacán y municipios como Ecatepec o Toluca han suspendido ventas. En total, más de 100 sitios a nivel nacional, un número que, aunque no masivo, genera caos localizado para automovilistas y transportistas.
La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró en mañanera que el lío en Chiapas "está por resolverse", con Sener y Pemex al frente, pero sin detalles concretos sobre pagos o plazos. Aquí radica la crítica: mientras la empresa estatal niega escasez, los hechos apuntan a ineficiencias crónicas en el transporte –autotanques y ductos–, agravadas por deudas con proveedores. No es nuevo; evoca el desabasto de 2019, cuando el combate al huachicol bajo AMLO dejó filas kilométricas y pérdidas millonarias, estimadas en 1,200 millones de dólares por la Coparmex. Hoy, sin distorsiones en precios según expertos como Alejandro Montufar de PETROIntelligence, el impacto se limita a inconvenientes cotidianos, pero ¿cuánto más puede aguantar la economía una Pemex dependiente de subsidios y con producción en declive (1.8 millones de barriles diarios en 2024, perfiles históricos de la Sener)?
Este episodio subraya la urgencia de diversificar proveedores y modernizar infraestructura, en un país donde Pemex controla el 80% del mercado. Si no se atiende, podría escalar a un golpe mayor para la movilidad urbana y el PIB. Por ahora, consumidores: paciencia y rutas alternas.