Dos Bocas: ¿Otro traspié en la refinería insignia de México?
Mientras Pemex insiste en que Dos Bocas alcanzará su capacidad total en 2026, las cifras actuales muestran una realidad distinta
Tabasco.- La refinería Olmeca en Dos Bocas, Tabasco, vuelve a ser noticia, esta vez por un incidente confirmado por Petróleos Mexicanos (Pemex) el 25 de abril de 2025, que detuvo temporalmente sus operaciones. Según un comunicado oficial, una falla eléctrica obligó a suspender actividades en la unidad catalítica, una de las piezas clave para producir gasolina. Aunque Pemex asegura que la refinería está en "fase de arranque" y que el problema fue atendido por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), el suceso reaviva las dudas sobre la viabilidad de este proyecto emblemático, cuya historia ha estado marcada por retrasos, sobrecostos y promesas incumplidas.
Inaugurada con bombo y platillo en julio de 2022 por el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador, Dos Bocas fue presentada como la solución para la autosuficiencia energética de México, con una capacidad proyectada de 340,000 barriles diarios (bpd) de crudo para producir 280,000 bpd de gasolinas y diésel. Sin embargo, a casi tres años de su apertura, los resultados distan de lo prometido. En julio de 2024, la refinería procesó 65,406 bpd, pero solo generó diésel y coque, sin una gota de gasolina. Para agosto, logró producir apenas 1,144 bpd de gasolina Magna, un 2% de lo esperado según expertos, y en septiembre no procesó crudo alguno, evidenciando que aún opera en fase de pruebas.
El costo de la refinería, inicialmente estimado en 8,000 millones de dólares, se disparó a más de 18,816 millones, según documentos de Pemex, lo que ha generado críticas por la falta de transparencia y la priorización de un proyecto que, para muchos analistas, es menos rentable que invertir en exploración y producción de crudo. La auditoría interna de Pemex en 2023 ya había advertido que el arranque en julio de ese año era "no factible" debido a retrasos en plantas clave, y fuentes internas citadas por Reuters en 2024 señalaron que la integración de los sistemas sigue siendo un desafío "agonizante".
El incidente reciente, descrito como "menor" por la presidenta Claudia Sheinbaum, no parece ser un caso aislado. En 2021, un rayo provocó un incendio en un tanque de almacenamiento; en 2023, una explosión dejó al menos cinco lesionados; y en 2024, reportes de fugas de gas obligaron a evacuaciones. Estos eventos, sumados a la falta de claridad sobre la magnitud del último percance, alimentan el escepticismo sobre la seguridad y estabilidad operativa de la refinería.
Mientras Pemex insiste en que Dos Bocas alcanzará su capacidad total en 2026, las cifras actuales muestran una realidad distinta: en octubre de 2024, el Sistema Nacional de Refinación procesó solo 730,744 bpd, el nivel más bajo en 12 meses, y Dos Bocas no contribuyó con un solo barril. La narrativa oficial sigue siendo optimista, pero los hechos sugieren que la refinería, lejos de ser un símbolo de soberanía energética, es un proyecto que aún lucha por despegar. ¿Podrá el gobierno actual revertir esta tendencia, o será Dos Bocas un recordatorio de las ambiciones que chocan con la realidad técnica y financiera?