Dos Bocas: Un elefante blanco que triplica su costo original a 20,900 millones de dólares
Proyecto en Tabasco, inicialmente presupuestado en 8,900 millones, enfrenta retrasos y aún no opera a plena capacidad
CDMX.- La refinería Dos Bocas, en Tabasco, se ha convertido en un símbolo de promesas incumplidas y sobrecostos descomunales. Según datos recientes, lo que comenzó como un proyecto con un presupuesto inicial de 8,900 millones de dólares ha escalado hasta los 20,900 millones, un incremento del 134%. Esto la posiciona como una de las refinerías más costosas del mundo, superando incluso a proyectos como la de Al-Zour en Kuwait, que duplicó su costo original, o la de Mostorod en Egipto, con un alza del 113%.
Impulsada por el gobierno mexicano como parte del Plan Nacional de Refinación de 2018 para reducir la dependencia de importaciones de combustible, la obra, liderada por Pemex, enfrentó retrasos y cuestionamientos desde el inicio. Inicialmente prevista para operar comercialmente en 2022 con una capacidad de 340,000 barriles diarios, expertos estiman que no alcanzará un rendimiento pleno hasta 2027 o 2028, y posiblemente solo al 60% de su capacidad. El dato más inquietante: a pesar de la inversión millonaria, aún no refina de manera efectiva, lo que alimenta las sospechas de opacidad y mala planeación.
Las críticas no se han hecho esperar. Mientras algunos defienden el proyecto como un paso hacia la autosuficiencia energética, otros lo ven como un derroche financiado con recursos públicos, agravado por la escasa fiscalización —la Auditoría Superior revisó apenas el 0.014% del costo—. En un contexto de transición energética global, donde las refinerías tradicionales pierden atractivo, Dos Bocas plantea una pregunta incómoda: ¿es este un legado de progreso o un costoso error estratégico? La respuesta, por ahora, sigue en el aire.