El crimen que expone las mentiras oficiales en Veracruz: FGE desmiente versión de Rocío Nahle sobre muerte de Irma Hernández
La Fiscalía confirma que la maestra jubilada, secuestrada por negarse a pagar extorsión, murió por tortura, contradiciendo a la gobernadora
Veracruz.- En un Veracruz asolado por la violencia de cárteles como el CJNG y el Golfo, el caso de Irma Hernández Cruz, una maestra jubilada de 62 años que complementaba su pensión como taxista en Álamo Temapache, revela la crudeza del crimen organizado y la fragilidad del discurso gubernamental. Secuestrada el 18 de julio por negarse a pagar la "cuota" extorsiva, su cuerpo fue hallado una semana después, el 25 de julio, con signos evidentes de brutalidad.
La Fiscalía General del Estado (FGE) confirmó este lunes que Hernández murió por tortura y agresiones físicas, desmintiendo rotundamente la versión de la gobernadora Rocío Nahle, quien atribuyó el deceso a un simple infarto durante una conferencia de prensa. Nahle, recién electa bajo la bandera de Morena, presentó incluso a un médico general como supuesto forense, sin que este hubiera realizado la necropsia, lo que genera dudas sobre un posible encubrimiento para maquillar las estadísticas de inseguridad en un estado con miles de desaparecidos anuales.
Cuatro sospechosos ya están vinculados a proceso por secuestro agravado, inicialmente detenidos por otros delitos como posesión de drogas. Este episodio no es aislado: extorsiones a transportistas son pan de cada día en la región norte, donde la impunidad alimenta el ciclo de terror. La contradicción oficial no solo erosiona la confianza pública, sino que cuestiona si el nuevo gobierno prioriza la imagen sobre la justicia real. Veracruz merece respuestas, no eufemismos.