El Show de la Fiscal: Bertha Alcalde y la desastrosa gestión de la detención de Simón Levy
Bertha Alcalde evade preguntas sobre el caso, mientras Levy reaparece en México negando la detención
CDMX.- En un episodio que parece sacado de una telenovela política, la fiscal Bertha Alcalde, se vio envuelta en un torbellino de contradicciones y mala gestión tras la supuesta detención de Simón Levy, ex subsecretario de Turismo durante el gobierno de López Obrador. Lo que debería haber sido una operación rutinaria de cooperación internacional se convirtió en un circo mediático, donde la falta de claridad y la torpeza institucional dejaron más preguntas que respuestas.
La historia comenzó cuando la Fiscalía capitalina anunció, con bombos y platillos, que Levy había sido detenido en Portugal por dos órdenes de aprehensión relacionadas con supuestas irregularidades en desarrollos inmobiliarios. Sin embargo, apenas unas horas después, el propio Levy reapareció en redes sociales desmintiendo la detención. El video, no solo desmiente la versión oficial, sino que pone en entredicho la capacidad de la Fiscalía para manejar información sensible.
El manejo del caso por parte de Alcalde ha sido, por decir lo menos, desastroso. En lugar de ofrecer una respuesta clara y contundente, la fiscal evadió las preguntas de la prensa con un lacónico “emitimos un comunicado al respecto”, mientras que la propia Claudia Sheinbaum, en la mañanera, pareció confirmar la detención con un “parece que sí”, pero sin aportar detalles concretos. Este tipo de respuestas ambiguas no solo genera desconfianza, sino que alimenta la percepción de que la Fiscalía opera más como un brazo político que como una institución de justicia.
El contexto no ayuda. Bertha Alcalde, hermana de la presidenta del partido Morena, Luisa María Alcalde, llegó al cargo con una aureola de lealtad a Morena, pero también con una trayectoria cuestionable. Su designación, aprobada por el Congreso capitalino en enero de 2025, fue vista por muchos como un nombramiento más por cuotas que por méritos. Y este episodio solo refuerza esa idea. ¿Cómo es posible que una institución con tanto presupuesto y recursos no pueda confirmar o desmentir una detención de manera eficiente?
Además, el caso de Levy no es nuevo. Desde su paso por la administración de Miguel Ángel Mancera, donde fue director de PROCDMX, ha sido señalado por presuntas irregularidades, pero ninguna de las acusaciones ha prosperado de manera convincente. Ahora, con esta supuesta detención en Portugal, surge la pregunta: ¿Estamos frente a un caso de justicia selectiva o simplemente de incompetencia institucional?
Lo cierto es que este episodio no solo daña la imagen de Bertha Alcalde, sino que también pone en entredicho la credibilidad de la Fiscalía capitalina en un momento en el que la ciudadanía exige mayor transparencia y eficiencia. Mientras tanto, Simón Levy, con su aparición en video, parece haber ganado la primera batalla mediática, dejando a la Fiscalía en una posición incómoda y a la opinión pública con más dudas que certezas.
En un país donde la justicia ya es vista con escepticismo, episodios como este no hacen más que profundizar la crisis de confianza. Y mientras tanto, Bertha Alcalde, en lugar de esclarecer, parece estar más ocupada en emitir comunicados que en hacer justicia.






