Elon Musk y su misión pronatalista: Una cruzada por la población y la colonización de Marte
El pronatalismo, definido como una ideología que promueve la reproducción para preservar la población y la identidad cultural, ha ganado tracción en ciertos círculos.
Washington.— Elon Musk, el magnate detrás de Tesla, SpaceX, la red social X y asesor del gobierno de Donald Trump, ha hecho del declive poblacional una de sus principales preocupaciones. Como líder del movimiento pronatalista, Musk aboga por un aumento masivo de la natalidad para, según él, salvar a la humanidad de una crisis demográfica que amenaza su existencia. Un reportaje reciente de The Wall Street Journal (16 de abril de 2025) profundiza en los detalles de esta misión, revelando aspectos de su vida personal y sus ambiciones, que no solo se limitan a la Tierra, sino que se extienden a la colonización de Marte.
El movimiento pronatalista y las motivaciones de Musk
El pronatalismo, definido como una ideología que promueve la reproducción para preservar la población y la identidad cultural, ha ganado tracción en ciertos círculos, especialmente entre sectores conservadores y de extrema derecha. Musk, descrito por The Guardian como “el pronatalista más famoso del mundo”, ha advertido repetidamente que la baja tasa de natalidad es una amenaza existencial para la civilización, superando incluso al cambio climático. En una sesión del Consejo de CEOs de The Wall Street Journal en 2021, afirmó que el declive demográfico es uno de los mayores riesgos para la humanidad, una postura que reiteró en 2023 al donar 10 millones de dólares a la Universidad de Texas en Austin para investigar esta problemática.
Según The Wall Street Journal, Musk no solo promueve la procreación en general, sino que enfatiza la necesidad de que personas “altamente inteligentes” tengan más hijos, una visión que ha sido criticada por su cercanía a ideas eugenésicas. En un mensaje de texto a la influencer Ashley St. Clair, Musk bromeó sobre la necesidad de usar madres sustitutas para alcanzar una “legión” de descendientes antes de un supuesto “apocalipsis”. Esta retórica refleja su creencia en la urgencia de repoblar no solo la Tierra, sino también de preparar a la humanidad para convertirse en una especie multiplanetaria.
La vida personal de Musk: 14 hijos y complejas relaciones
The Wall Street Journal detalla cómo Musk, padre de al menos 14 hijos con cuatro mujeres, gestiona una red de acuerdos de confidencialidad y manutención para mantener su vida personal fuera del foco público. Entre las madres de sus hijos se encuentran la cantante Grimes, la ejecutiva de Neuralink Shivon Zilis, y la influencer Ashley St. Clair. El artículo destaca tensiones en estas relaciones, como el caso de St. Clair, quien dio a luz a un hijo de Musk, Romulus, en febrero de 2024. Según el reportaje, Musk pagó a St. Clair 2 millones de dólares en gastos durante su embarazo, pero ella se negó a firmar un acuerdo de confidencialidad y exigió una prueba de paternidad, que confirmó la relación con un 99.9999% de probabilidad. Actualmente, St. Clair demanda la custodia exclusiva del menor.
Otro caso notable es el de Grimes, quien recurrió a la red social X para suplicar a Musk que respondiera ante una “crisis médica” de uno de sus hijos, alegando que su falta de comunicación podría causar un “daño permanente”. Estos episodios han llevado a críticas, como las de la columnista Marina Hyde, quien cuestiona si el pronatalismo de Musk es solo una excusa para un comportamiento irresponsable como padre.
Conexión con SpaceX y la colonización de Marte
El reportaje de The Wall Street Journal conecta la cruzada pronatalista de Musk con sus ambiciones espaciales. Para Musk, la colonización de Marte no es solo una hazaña tecnológica, sino una necesidad para garantizar la supervivencia de la humanidad. En publicaciones en X, ha enfatizado que “convertirse en multiplanetario es fundamental para la supervivencia a largo plazo de la humanidad y de toda la vida tal como la conocemos”. Su empresa, SpaceX, está desarrollando tecnologías clave, como el cohete Starship, para hacer posible este objetivo. En 2020, Musk expresó que no se trata solo de visitar Marte, sino de establecer una ciudad autosuficiente capaz de sostener una población humana significativa.
En este contexto, el pronatalismo de Musk adquiere una dimensión cósmica: aumentar la población terrestre, especialmente de individuos “inteligentes”, es un paso hacia la creación de una fuerza demográfica capaz de poblar otros planetas. Sin embargo, esta visión ha generado críticas por su enfoque elitista y por ignorar las complejidades sociales y económicas que afectan las tasas de natalidad, como el acceso a vivienda, atención médica y educación.
Críticas y controversias
El enfoque de Musk ha generado controversias significativas. Expertos demográficos, citados por CNN, argumentan que las preocupaciones pronatalistas sobre un colapso civilizacional son exageradas. En Estados Unidos, la tasa de natalidad ha caído por debajo del nivel de reemplazo (2.1 hijos por mujer), pero factores como la migración y los avances tecnológicos pueden mitigar el impacto de este declive. Además, la insistencia de Musk en que las personas “inteligentes” deben reproducirse ha sido criticada por su similitud con discursos eugenésicos, lo que genera rechazo en algunos sectores.
Por otro lado, el movimiento pronatalista no es homogéneo. Mientras Musk y otros “tecnólogos” de Silicon Valley abogan por soluciones que incluyen tecnología reproductiva como la fertilización in vitro o la ingeniería genética, otros sectores, como los pronatalistas tradicionales o “trads”, enfatizan valores religiosos y roles de género estrictos. Esta diversidad se evidenció en la conferencia NatalCon 2025 en Texas, que atrajo a una mezcla de tecnólogos, conservadores y familias tradicionales, aunque algunos asistentes criticaron el enfoque personal de Musk por considerarlo incoherente con los valores familiares.
Contexto político y alianzas
La postura pronatalista de Musk se alinea con ciertas políticas de la administración Trump. Por ejemplo, el secretario de Transporte, Sean Duffy, emitió un memorando en 2025 prometiendo más fondos a regiones con tasas de natalidad más altas, una medida que refleja las prioridades pronatalistas. Además, Musk ha fortalecido su relación con Trump, pasando de criticarlo en 2016 a convertirse en un aliado clave en 2024, con un rol destacado en el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). Esta alianza ha amplificado la influencia de Musk en el discurso político, aunque también ha contribuido a su declive en popularidad, con una encuesta de The Wall Street Journal de enero de 2025 mostrando que solo el 40% de los estadounidenses lo ven favorablemente.
Conclusión
La cruzada pronatalista de Elon Musk combina su preocupación por el declive demográfico con su visión de colonizar Marte, respaldada por su riqueza, influencia y empresas como SpaceX. Sin embargo, su enfoque ha generado controversias por su elitismo, su vida personal compleja y las críticas de expertos que consideran sus temores exagerados. Mientras Musk sigue abogando por más nacimientos y una humanidad multiplanetaria, su legado en este ámbito sigue siendo objeto de debate.