Escándalo en la Marina: Capitán de la Marina se suicida en medio de investigación por huachicol
El capitán Abraham Jeremías Pérez Ramírez, jefe de Protección Portuaria en Altamira, fue hallado muerto en un aparente suicidio, tras ser vinculado a una red de contrabando de combustible ilegal
Tamaulipas.- En un giro dramático que sacude a la Secretaría de Marina (Semar), el capitán Abraham Jeremías Pérez Ramírez, jefe de la Unidad de Protección Portuaria en Altamira, Tamaulipas, fue hallado muerto este lunes en sus oficinas del puerto. Fuentes federales confirmaron que se trató de un suicidio, apenas días después de que saliera a la luz su presunta implicación en una vasta red de huachicol fiscal —el contrabando y venta ilegal de combustible adulterado—. Pérez Ramírez habría recibido 100 mil pesos para permitir el paso de un buque cargado con diésel irregular, un soborno que lo vinculaba directamente a esta trama de corrupción.
Este caso no es aislado: forma parte de una operación mayor desmantelada por la Fiscalía General de la República (FGR), que ha llevado a la detención de al menos 14 personas, incluyendo al vicealmirante Manuel Roberto Farías Laguna, sobrino político del exsecretario de Marina Rafael Ojeda Durán durante el gobierno de AMLO. Farías Laguna y su hermano, también marino, son acusados de liderar esta red que involucra a altos mandos de la Semar, funcionarios aduanales y empresarios, facilitando el ingreso de combustible ilegal por puertos como Altamira. El escándalo expone nepotismo y fallas sistémicas en una institución clave para combatir el huachicol, que cuesta al erario mexicano miles de millones anuales en pérdidas por Pemex.
Críticamente, el timing del suicidio plantea interrogantes sobre la presión en los implicados menores, mientras los peces gordos enfrentan procesos. ¿Coincidencia o algo más? Las autoridades deben investigar a fondo para evitar dudas sobre la integridad de la lucha anticorrupción, en un país donde el huachicol ha mutado de ductos terrestres a rutas marítimas sofisticadas.
