Guerreros Buscadores de Jalisco denuncia exclusión de la FGR en investigación de campo de exterminio en Teuchitlán
"Inadmisible que a nuestro colectivo se le quiera excluir por parte de la Fiscalía General de la República, nos están violando nuestros derechos como víctimas".
Teuchitlán, Jalisco.- El colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco alzó la voz este domingo para denunciar que la Fiscalía General de la República (FGR) les impidió participar en el procesamiento del rancho Izaguirre, ubicado en el municipio de Teuchitlán, donde recientemente se descubrieron crematorios clandestinos operados por el crimen organizado. A través de su cuenta en la red social X, el grupo, conformado por familiares de personas desaparecidas, calificó esta acción como una violación a sus derechos como víctimas y exigió la intervención de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
"Inadmisible que a nuestro colectivo se le quiera excluir por parte de la Fiscalía General de la República, nos están violando nuestros derechos como víctimas. Solicitamos la intervención de la CNDH, pues no quieren que estemos presentes en el procesamiento", expresó el colectivo en su publicación, acompañada de un oficio emitido por la Comisión de Búsqueda de Personas de Jalisco. En dicho documento, firmado por el comisionado estatal Víctor Hugo Ávila Barrientos y fechado el 16 de marzo, se confirma que la FGR asumió el control de la investigación y restringió el acceso al lugar, limitándolo únicamente a personal oficial. El oficio añade que se notificará a los buscadores “en tiempo y forma” cuando puedan acudir como observadores, decisión que ha generado indignación entre los afectados.
El hallazgo en el rancho Izaguirre, localizado en la localidad de La Estanzuela, fue dado a conocer el pasado 7 de marzo por el propio colectivo durante una transmisión en vivo. En el lugar se encontraron hornos de alta capacidad presuntamente utilizados para calcinar cientos de cuerpos, así como maletas, ropa y objetos personales que revelan la magnitud de la tragedia. Días después, los buscadores compartieron imágenes de los hallazgos: biblias, fotografías de niños, cartas de despedida, llaveros y carteras entre pilas de restos óseos. Entre los objetos destacaron una hoja con la frase "Soy el loco de la familia, del que nadie espera nada, pero sueña con tenerlo todo" y una carta de Eduardo Lerma Nito, un joven de 20 años, que escribió: "Mi amor, si algún día ya no regreso, sólo te pido que recuerdes lo mucho que te amo y digas 'se me fue mi enojón, berrinchón y celoso'".
El rancho ya había sido asegurado por la fiscalía de Jalisco en septiembre de 2024, aunque en ese momento las autoridades estatales aseguraron no haber encontrado evidencia de cremaciones. Sin embargo, el reciente descubrimiento del colectivo contradice esas afirmaciones y ha puesto en el foco la posible complicidad o negligencia de las instituciones. Según los Guerreros Buscadores, el lugar también funcionaba como un centro de adiestramiento del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), donde jóvenes eran reclutados bajo engaños, despojados de sus pertenencias y, en muchos casos, asesinados y incinerados. "Deciden si vives o mueres dependiendo de si les eres útil. La mayoría terminan hechos cenizas", denunciaron.
La exclusión de los buscadores por parte de la FGR ha reavivado las críticas hacia las autoridades por su manejo de la crisis de desapariciones en México. Este caso se suma a las recientes protestas en Teuchitlán, donde cientos de personas han exigido justicia y avances en la búsqueda de desaparecidos tras el hallazgo en el rancho Izaguirre. Organizaciones y colectivos han advertido que estos crematorios clandestinos podrían ser solo la punta del iceberg en un país que, según sus palabras, “no es un país, sino una fosa”.