India lanza ataques selectivos en Paquistán tras atentado en Cachemira, escalando tensiones regionales
El conflicto en Cachemira, una región disputada desde la partición de 1947, ha sido un foco constante de enfrentamientos.
India.- La India llevo acabo la operación "Sindoor", un ataque aéreo contra nueve supuestas "bases terroristas" en Paquistán y la Cachemira controlada por Paquistán, en respuesta al atentado del 22 de abril que dejó víctimas entre turistas en la Cachemira india. Las Fuerzas Armadas indias aseguraron que la operación fue "focalizada, mesurada y no escalonada", evitando instalaciones militares paquistaníes y demostrando "considerable moderación". Sin embargo, Paquistán denunció la muerte de al menos tres civiles, incluido un niño, y prometió represalias, lo que ha elevado la tensión entre las dos potencias nucleares.
El conflicto en Cachemira, una región disputada desde la partición de 1947, ha sido un foco constante de enfrentamientos. El atentado de abril, atribuido por India a milicias respaldadas por Paquistán, reavivó las acusaciones mutuas. Nueva Delhi sostiene que los sitios atacados albergaban infraestructura de grupos terroristas, aunque no ha presentado pruebas públicas. Por su parte, Islamabad calificó los ataques como "cobardes", alegando que se golpearon objetivos civiles, incluida una mezquita en Punjab, y reportó un niño muerto y dos heridos.
La escalada no se detuvo ahí. Horas después de los ataques indios, el ejército de India acusó a Paquistán de violar el acuerdo de alto al fuego de 2003 con disparos de artillería en los sectores de Bhimber Gali y Poonch-Rajauri, a lo que respondió "de forma calibrada". Medios paquistaníes informaron que Islamabad ya inició acciones de represalia, aunque no se han detallado.
El contexto histórico agrava la situación. India y Paquistán han librado tres guerras desde su independencia, dos de ellas por Cachemira, y mantienen una frágil tregua marcada por frecuentes violaciones. Ambos países poseen arsenales nucleares, lo que convierte cualquier escalada en una amenaza global. La comunidad internacional, incluida la ONU, ha instado repetidamente al diálogo, pero las negociaciones bilaterales han sido infructuosas desde 2016.
El presidente estadounidense, Donald Trump, expresó su deseo de que el conflicto "termine muy pronto", recordando la larga historia de hostilidades. Sin embargo, su comentario, que alude a "siglos de lucha", simplifica un problema arraigado en disputas coloniales y geopolíticas modernas, sin ofrecer una postura clara sobre mediación.
La operación india, aunque presentada como quirúrgica, carece de transparencia sobre los objetivos atacados, lo que alimenta la narrativa paquistaní de agresiones injustificadas. La muerte de civiles reportada por Islamabad, de confirmarse, podría complicar la posición de India en el escenario internacional. Por otro lado, la rápida respuesta de Paquistán, incluyendo violaciones al alto al fuego, sugiere una escalada premeditada que podría desestabilizar aún más la región. La ausencia de mediadores efectivos y la retórica beligerante de ambos lados dificultan una desescalada inmediata.
Los ataques indios ocurrieron el 6 de mayo de 2025, según comunicados oficiales. Paquistán reportó tres muertes, incluida la de un menor, corroborada por fuentes de seguridad a EFE. El atentado del 22 de abril en Cachemira india es el desencadenante citado por Nueva Delhi. Las violaciones al alto al fuego fueron confirmadas por el ejército indio en X.
La comunidad internacional observa con preocupación. Sin un esfuerzo diplomático urgente, el ciclo de represalias amenaza con sumir a la región en un conflicto de consecuencias imprevisibles.