Lady pinche gato muerto de hambre: Cuando el drama supera al dinero
El incidente, captado en video, ocurrió en Hacienda Los Capulines y ha generado críticas por la actitud de la mujer
Puebla.- Ah, Puebla, tierra de moles, talavera y, al parecer, de vecinas que prefieren el escándalo a pagar sus cuentas. En el fraccionamiento Hacienda Los Capulines, una residente decidió protagonizar un episodio digno de reality show, insultando al vigilante porque, oh sorpresa, no le levantaron la pluma al entrar. ¿La razón? Simple: no ha pagado las cuotas de mantenimiento. Porque, claro, vivir en un fraccionamiento privado sin aportar un peso es el sueño de cualquier “rica” que no lo es.
El video, que ya circula por X como si fuera el próximo meme viral, muestra a la mujer, apodada “Lady Pinche Gato Muerto de Hambre”, lanzando improperios al pobre vigilante, quien, por cierto, solo estaba haciendo su trabajo. ¿Su crimen? Seguir el protocolo de acceso restringido para quienes no pagan. Pero no, para ella, el problema no es su falta de responsabilidad, sino el “pinche gato muerto de hambre” que osa cuestionarla. Porque nada grita clase como insultar a un trabajador por hacer su trabajo, ¿verdad?
Lo irónico aquí es que este tipo de episodios no son nuevos. En México, los fraccionamientos privados dependen de las cuotas vecinales para funcionar, pero parece que algunos residents prefieren fingir que viven en un paraíso financiado por hadas. ¿Acaso creen que la vigilancia, el mantenimiento y la recolección de basura son gratis? Spoiler: no lo son. Y mientras esta señora se dedica a hacer un show, el resto de los vecinos probablemente están pagando por su falta de civismo.
El caso también pone en relieve un problema estructural: la dificultad para hacer cumplir estas cuotas en comunidades que no siempre tienen un marco legal sólido. Pero eso no excusa el comportamiento de “Lady Pinche Gato Muerto de Hambre”, quien, en lugar de resolver su deuda, prefirió montar un circo. Porque, al fin y al cabo, nada dice “yo soy la víctima” como gritarle al vigilante.
En resumen, este episodio no es solo un chiste viral; es un espejo de una sociedad donde algunos prefieren el drama al deber. Mientras tanto, el vigilante, quien seguramente gana una fracción de lo que esta señora gasta en café, sigue siendo el héroe anónimo de esta historia. Porque, al final, el verdadero “gato muerto de hambre” no es quien cobra las cuotas, sino quien las evade. ¿Lección aprendida? Probablemente no, pero al menos nos dejó un buen meme.



