“Me prometió ayuda y no cumplió”: Sheinbaum enfrenta reclamos en Veracruz mientras Nahle calla
Una damnificada acusa a la gobernadora Rocío Nahle de no cumplir promesas de ayuda, mientras Sheinbaum promete atención inmediata
Veracruz.- En un escenario que más parece un ring político que un acto de solidaridad, la presidenta Claudia Sheinbaum fue recibida en Veracruz con un reclamo directo que desnudó las fallas en la gestión de desastres naturales en el estado. Una mujer, entre la multitud de damnificados por las recientes inundaciones, le espetó a Sheinbaum que la gobernadora Rocío Nahle le había prometido ayuda que nunca llegó. La escena, captada en video y viralizada en redes, muestra a Sheinbaum inclinándose para escuchar, mientras la mujer, visiblemente frustrada, insiste: “Me prometió ayuda y no cumplió”.
El momento no solo pone en evidencia la descoordinación entre el gobierno federal y el estatal, sino que también revive las críticas contra Nahle, cuya gestión ha sido cuestionada por su falta de preparación ante emergencias. Hace apenas unos meses, en mayo, Nahle decidió cancelar una póliza de seguros contra desastres naturales que protegía a Veracruz con casi 400 millones de pesos, apostando por una aseguradora estatal que, hasta ahora, no ha demostrado eficacia. Esta decisión, según expertos, dejó al estado vulnerable frente a eventos como los que ahora azotan la región.
Sheinbaum, por su parte, reaccionó con pragmatismo, en un intento por desviar la atención. Sin embargo, el daño ya estaba hecho. La multitud, con celulares en mano, capturó el momento, y las redes sociales no tardaron en explotar con críticas hacia Nahle, a quien acusan de soberbia y desinterés. “La gobernadora ni siquiera se atrevió a enfrentar a su gente”, comentaba un usuario en X, mientras otro recordaba que Nahle ha sido más visible en eventos protocolarios que en crisis reales.
El contexto no ayuda. Veracruz, históricamente golpeado por desastres naturales, ha visto cómo su sistema de protección civil, bajo la dirección de Nahle, ha sido incapaz de responder de manera efectiva. La gobernadora, conocida por su estilo autoritario, ha sido criticada por priorizar proyectos de infraestructura sobre la preparación para emergencias, dejando a comunidades enteras a merced de las lluvias. Además, su cercanía con Sheinbaum, quien pertenece al mismo partido, Morena, complica el escenario, ya que cualquier crítica a Nahle podría interpretarse como un desgaste interno.
Este episodio no es aislado. En julio, Nahle ratificó a Guadalupe Osorno Maldonado, una funcionaria sin experiencia técnica en protección civil, al frente de la dependencia, lo que ha sido visto como un acto de nepotismo político. La consecuencia: una respuesta tardía y desorganizada ante las inundaciones, que han dejado decenas de familias sin hogar y con pérdidas millonarias.
Mientras tanto, Sheinbaum, quien llegó a Veracruz como parte de un recorrido por estados afectados, se vio obligada a prometer atención inmediata a la mujer, aunque el gesto pareció más un paliativo que una solución estructural. “Ahorita te atendemos”, dijo, mientras la multitud seguía grabando. Sin embargo, la pregunta que queda en el aire es: ¿dónde estaba Rocío Nahle cuando su gente más la necesitaba?
Este incidente no solo expone las fallas de la gestión local, sino que también pone a prueba la cohesión del proyecto morenista, que ha prometido transformar la política en México. Para muchos, el silencio de Nahle y la reacción de Sheinbaum son síntomas de un sistema que, a pesar de su retórica, sigue fallando en los momentos críticos. Y mientras Veracruz se recupera de las aguas, la política local sigue hundida en sus propias tormentas.



