México rompe la maldición: superávit de 2.325 millones en cuenta corriente, ¿un respiro o espejismo?
Este resultado se atribuye a un aumento en las exportaciones no petroleras y remesas, según el informe oficial de Banxico
CDMX.- En un giro inesperado para los analistas, México cerró el tercer trimestre de 2025 con un superávit en su cuenta corriente de 2.325 millones de dólares, equivalente al 0.5% del PIB, según datos frescos del Banco de México. Esto pone fin a dos trimestres consecutivos de déficits y marca el segundo saldo positivo en lo que va del año, tras el robusto 10.830 millones del último cuarto de 2024. Comparado con el mismo periodo de 2024, donde se arrastraba un rojo de 2.042 millones (-0.5% del PIB), el cambio es notorio: las exportaciones no petroleras subieron 2.289 millones, y el déficit en ingresos primarios se achicó en 5.692 millones, gracias a una balanza comercial más sólida y menores fugas de dividendos.
El motor de esta sorpresa radica en un repunte exportador impulsado por el nearshoring y una demanda estadounidense aún resiliente, pese a la incertidumbre postelectoral al norte de la frontera. Sin embargo, no todo brilla: las remesas cayeron levemente, el déficit en servicios se amplió por turismo tibio, y la cuenta financiera mostró una salida neta de 3.245 millones, con reservas crecientes pero inversión extranjera directa en pausa. En un contexto global de tensiones comerciales y una Fed más laxa que aviva el apetito por riesgo, México navega aguas revueltas, donde la moderación en economías emergentes y la sombra de aranceles trumpianos acechan.
¿Sostenible? Alberto Ramos de Goldman Sachs lo califica de “sorpresivo”, pero advierte que revisiones a la baja en déficits previos inflan el número; sin reformas estructurales, este verde podría ser fugaz ante un 2026 volátil. Para un país que depende en un 80% de EE.UU., este superávit es un bálsamo temporal, no la cura para la vulnerabilidad crónica. Ojalá no sea solo un paréntesis en la crónica de desequilibrios.



