Noruega retira inversión en Pemex por riesgos de corrupción, según Reuters
El informe del consejo, según Reuters, identifica acusaciones de sobornos que involucran a “un número significativo de trabajadores” y a un exejecutivo de Pemex.
CDMX.- El Fondo de Riqueza Soberana de Noruega, uno de los mayores inversores institucionales del mundo con activos por 1.8 billones de dólares, anunció la desinversión total de sus bonos en Petróleos Mexicanos (Pemex), citando preocupaciones por posibles vínculos de la empresa con prácticas corruptas. La decisión, reportada por Reuters el pasado domingo, se basa en un informe del Consejo de Ética del fondo, que señala un “riesgo inaceptable” de corrupción en la petrolera mexicana entre 2004 y 2023.
El informe del consejo, según Reuters, identifica acusaciones de sobornos que involucran a “un número significativo de trabajadores” y a un exejecutivo de Pemex durante los gobiernos de Vicente Fox (2000-2006), Felipe Calderón (2006-2012), Enrique Peña Nieto (2012-2018) y Andrés Manuel López Obrador (2018-2024). Aunque el documento no menciona explícitamente a Emilio Lozoya, exdirector de Pemex (2012-2016) y figura central en el escándalo de Odebrecht, las sospechas de corrupción en la empresa han sido un tema recurrente en México, con casos documentados que incluyen pagos ilícitos para obtener contratos.
La decisión de Noruega refleja el creciente escrutinio global sobre la gobernanza corporativa de Pemex, una empresa que arrastra una deuda superior a los 100 mil millones de dólares y enfrenta desafíos operativos y financieros. El fondo noruego, conocido por su estricta política ética que ha llevado a excluir a empresas como Walmart o Boeing por violaciones similares, no recibió respuesta de Pemex al intentar contactarla, según Reuters.
La desinversión llega en un momento crítico para Pemex, que ha sido señalada por ineficiencias y escándalos de corrupción durante décadas. El caso Odebrecht, que implicó sobornos a funcionarios en varios países de América Latina, marcó a Pemex durante el sexenio de Peña Nieto, mientras que las acusaciones de irregularidades en contratos persisten. La falta de transparencia en la empresa, combinada con su dependencia de subsidios gubernamentales, ha erosionado la confianza de inversores internacionales.
Si bien el fondo noruego no detalla el monto desinvertido, su salida envía una señal negativa al mercado sobre la credibilidad de Pemex. Esto podría complicar los esfuerzos del gobierno mexicano para refinanciar la deuda de la petrolera o atraer capital extranjero, en un contexto donde la producción de crudo ha caído a mínimos históricos (alrededor de 1.6 millones de barriles diarios en 2024, según datos de la propia Pemex).
La ausencia de una respuesta oficial de Pemex ante la consulta de Reuters refuerza la percepción de opacidad en la empresa. Además, el informe noruego no aporta nombres ni casos específicos, lo que limita el análisis de las acusaciones. Sin embargo, la decisión del fondo, que gestiona inversiones en más de 9 mil empresas globales, subraya la necesidad de que Pemex aborde de manera urgente sus problemas estructurales y de gobernanza para recuperar la confianza internacional. En un entorno donde la transición energética global reduce el atractivo de las petroleras estatales, la salida de Noruega podría ser solo el comienzo de un éxodo de inversores si no se implementan reformas profundas.