Nueva instalación de detención para inmigrantes "Speedway Slammer" anunciada en Indiana
La secretaria Kristi Noem informó que el centro, en el Miami Correctional Center, sumará 1.000 camas bajo un acuerdo con el estado
EU.- La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, anunció este martes una controvertida instalación de detención de inmigrantes en Indiana, bautizada con el llamativo nombre de "Speedway Slammer". Según el comunicado, esta nueva estructura, ubicada en el Miami Correctional Center en colaboración con el Departamento de Correcciones de Indiana, ampliará la capacidad de detención de ICE en 1.000 camas. Sin embargo, la escasez de detalles sobre su implementación, fechas de apertura o el acuerdo específico deja más preguntas que respuestas.
El anuncio llega en un contexto de endurecimiento de las políticas migratorias bajo la administración actual, que ya había propuesto en 2018 expandir la capacidad de detención a 48.000 personas. Noem, conocida por su postura dura contra la inmigración ilegal, advirtió que quienes sean llevados a esta instalación perderán toda posibilidad de regresar a Estados Unidos, un mensaje que algunos interpretan como una estrategia disuasoria más que como una solución humanitaria.
La elección del nombre "Speedway Slammer" —un guiño irónico al famoso Indianapolis Motor Speedway— ha generado reacciones mixtas. Mientras algunos lo ven como un intento de proyectar firmeza, otros lo critican como un ejercicio de propaganda que deshumaniza a los detenidos, muchos de los cuales, según el propio DHS, serán "los peores de los peores" criminales indocumentados. Sin embargo, la falta de transparencia sobre quiénes serán alojados y bajo qué condiciones abre la puerta a especulaciones y preocupaciones sobre derechos humanos.
Este proyecto no es aislado: Florida planea convertir Camp Blanding en otra instalación similar, reflejando una tendencia nacional hacia la expansión de centros de detención. Con el precedente de hacinamiento en instalaciones como las de Texas en 2019, la pregunta clave es si "Speedway Slammer" será una respuesta efectiva o simplemente un parche político en un sistema migratorio que sigue sin resolverse. Por ahora, Indiana y el DHS deben aclarar cómo equilibrarán seguridad y humanidad en esta nueva etapa.