¿Optimus, el futuro de Tesla o un truco de marketing?
El robot humanoide de Tesla mostró torpeza en público, levantando cuestionamientos sobre su capacidad real para tareas autónomas
EU.- Optimus, el robot humanoide de Tesla, protagonizó un espectáculo en Times Square repartiendo dulces, pero su torpeza y dependencia de la teleoperación dejaron más dudas que certezas. Mientras Elon Musk promete producción limitada para 2026, críticos destacan que el robot aún no opera de forma autónoma, a diferencia de competidores chinos que ya lo hacen. Este despliegue, coincidiendo con la visita de Robyn Denholm al Nasdaq, parece más un golpe de efecto publicitario que un avance tecnológico real.
El movimiento lento de Optimus y su incapacidad para interactuar fluidamente con el público contrastan con las expectativas generadas desde su anuncio en 2021. Aunque el evento simboliza la cercanía de la robótica avanzada, también revela las limitaciones actuales de Tesla en este campo. Mientras la compañía busca consolidar su narrativa de innovación, la verdadera prueba será superar los desafíos técnicos, no solo impresionar en plazas públicas. Por ahora, Optimus parece más un esbozo que una revolución.



