¿Realidad o espectáculo?: La supuesta investigación de EE.UU. a Adán Augusto y su red de lavado
Reporte señala pesquisas desde 2021, pero no hay confirmación oficial de autoridades estadounidenses
CDMX.- En las últimas horas, un tuit del periodista Ricardo Alemán ha encendido las redes sociales al afirmar que Estados Unidos estaría investigando una presunta red de lavado de dinero ligada a Adán Augusto López Hernández, actual senador y exsecretario de Gobernación, junto a su familia. La publicación, sugiere un escándalo de proporciones, pero las pruebas concretas brillan por su ausencia, dejando espacio a la especulación.
El origen de la noticia parece remontarse a una columna de Raymundo Riva Palacio en, donde se menciona que desde 2021 las autoridades estadounidenses habrían iniciado pesquisas sobre operaciones sospechosas vinculadas a Adán Augusto y sus hermanos, Melchor y la fallecida Rosalinda López. Esta última, exjefa de Auditoría Fiscal del SAT durante el gobierno de López Obrador, habría facilitado, según el texto, un esquema de evasión fiscal que luego Melchor habría aprovechado. Incluso se apunta a Rutilio Escandón, exgobernador de Chiapas y esposo de Rosalinda, como parte de una supuesta red de financiamiento ilícito, incluyendo el controvertido negocio del huachicol fiscal.
Sin embargo, el contexto exige cautela. Adán Augusto, un político experimentado y fundador de Morena, ha negado rotundamente cualquier irregularidad, y hasta ahora no hay documentos oficiales ni comunicados del Departamento de Justicia de EE.UU. que confirmen estas acusaciones. Las investigaciones sobre lavado de dinero en México, como el reciente caso del CJNG y su esquema de fraudes con propiedad compartida, muestran que Estados Unidos sí persigue redes transnacionales, pero las menciones a López Hernández carecen de respaldo verificable en fuentes públicas. Además, la muerte de Rosalinda en 2024 complica cualquier intento de sustanciar estas alegaciones.
Las reacciones en X oscilan entre el apoyo a la idea de que “por fin se haga justicia” y el escepticismo, con algunos usuarios calificando el tema como un “show” político. Sin datos concretos —como citaciones judiciales o reportes de inteligencia desclasificados—, esta historia huele más a estrategia mediática que a un caso sólido. Mientras tanto, el silencio oficial y la polarización en México alimentan el debate, pero sin pruebas, todo queda en el terreno de las conjeturas. ¿Investigación real o cortina de humo? El tiempo, y los hechos, lo dirán.