¿Regreso al ring o impunidad garantizada? Julio César Chávez Jr. vuelve a boxear bajo libertad condicional
El boxeador fue liberado en agosto tras ser deportado de EE.UU. y sigue bajo investigación de la FGR por presuntos vínculos con el Cártel de Sinaloa
CDMX.- El anuncio de Julio César Chávez ha encendido las alarmas: su hijo, Julio César Chávez Jr., regresará al ring el 13 de diciembre en San Luis Potosí, pese a enfrentar un proceso por delincuencia organizada bajo libertad condicional. Según el legendario boxeador, tanto él como su hermano Omar están listos para pelear, e incluso no descarta una exhibición personal. Sin embargo, detrás de la euforia deportiva se esconde una historia que cuestiona la justicia mexicana.
Chávez Jr. salió de una cárcel federal en Sonora el 24 de agosto tras ser deportado de Estados Unidos, donde enfrentó cargos por su presunta vinculación con el Cártel de Sinaloa en delitos como tráfico de armas, según un informe de la Fiscalía General de la República (FGR) desde 2019. Un juez en Hermosillo lo dejó en libertad condicional, con restricciones que incluyen no salir del país sin permiso, aunque su equipo legal ya planea solicitar excepciones para sus compromisos pugilísticos. Este caso forma parte de una investigación más amplia sobre el narco en México, iniciada tras denuncias de Washington.
El retorno al boxeo, respaldado por su padre, levanta serias dudas. ¿Es este un ejemplo más de la impunidad que permea el sistema judicial mexicano, donde figuras públicas parecen librarse de las consecuencias? La imagen de Chávez Jr. entrenando en el Coliseo Boxing Club días después de su liberación choca con las graves acusaciones en su contra, mientras el plazo de tres meses para la investigación complementaria se antoja insuficiente ante la magnitud del caso. La justicia, una vez más, parece caminar a un ritmo distinto cuando se trata de alguien con nombre y conexiones.