Sarampión sin frenos: México alcanza los 5,231 casos en plena alerta nacional
La Secretaría de Salud reportó 5,231 casos confirmados acumulados y 23 defunciones. Chihuahua, Jalisco y Michoacán concentran la mayoría de los contagios; 95% de los afectados no estaban vacunados
CDMX.- México enfrenta un repunte alarmante de sarampión, con 78 contagios confirmados en la última semana epidemiológica, elevando el total acumulado a 5,231 casos en 2025, según el último informe de la Dirección General de Epidemiología (DGE) de la Secretaría de Salud. Chihuahua lidera con miles de infecciones, seguido de Jalisco, Michoacán y Guerrero, donde la enfermedad golpea con fuerza en comunidades vulnerables. Este salto, reportado el 18 de noviembre, no es un dato aislado: la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ya advertía en septiembre que el país sumaba 4,553 casos y 19 muertes, la mayoría en niños no vacunados.
Para ponerlo en perspectiva, retrocedamos un poco. México se declaró libre de sarampión en 2017 tras décadas de campañas exitosas, con menos de 10 casos anuales entre 2006 y 2018, según datos históricos de la OPS y la OMS. Aquellos años de control parecían un triunfo epidemiológico, impulsado por coberturas de vacunación superiores al 95%. Pero el brote de 2020, con 1,364 infecciones importadas en su mayoría, abrió la caja de Pandora, y 2025 marca la pérdida oficial del estatus de eliminación, como confirmó la OPS el 10 de noviembre. Hoy, el 95% de los afectados carece de esquema completo, un retroceso que huele a negligencia acumulada.
¿Qué hay detrás de esta avalancha? La hesitación vacunal, agravada por desinformación en redes y brechas en la atención fronteriza —piensen en Chihuahua, pegada a EE.UU., con sus flujos migratorios—, explica gran parte del drama. Niños de 1 a 4 años representan el pico de vulnerabilidad, y las 23 defunciones registradas hasta ahora, todas en no vacunados, son un recordatorio brutal de lo evitable que es esto. La DGE insiste en que el virus circula endémicamente, pero ¿dónde está el refuerzo masivo prometido? Las campañas aisladas no bastan cuando la cobertura nacional ronda el 85%, por debajo del umbral de inmunidad colectiva.
Este no es solo un problema médico; es un fallo sistémico que amenaza con sobrecargar hospitales ya tensionados. Urge una respuesta coordinada: vacunación obligatoria en escuelas, vigilancia fronteriza y campañas que combatan mitos con hechos duros. Si no actuamos ya, el sarampión no será una alerta, sino una epidemia declarada. La salud pública no espera por burocracia.



